La Asociación de Licoreras de Colombia (ACIL) ha reforzado su compromiso de combatir el comercio ilegal de licores en el país. En un evento celebrado en Bogotá el pasado 11 de abril, la organización presentó una serie de estrategias destinadas a frenar la adulteración y la distribución clandestina de bebidas alcohólicas.

Bajo el lema «¡Juntos contra el mercado ilegal!», los representantes de ACIL dejaron en claro que la calidad y la legalidad son pilares fundamentales en cada paso del proceso de producción y comercialización de licores. La asociación ha expresado su preocupación por los riesgos que representa el consumo de bebidas adulteradas, que pueden contener sustancias nocivas para la salud.

«Estamos decididos a proteger a los consumidores y a las empresas licoreras legales que operan de manera responsable», declaró el presidente de ACIL. «El mercado ilegal no solo pone en peligro la salud de las personas, sino que también socava la economía y la reputación de nuestra industria».

Entre las estrategias anunciadas se encuentran campañas de concientización dirigidas al público, una mayor colaboración con las autoridades para reforzar los controles y la aplicación de la ley, y la implementación de medidas de seguridad adicionales en los productos para dificultar la falsificación.

Además, ACIL ha hecho un llamado a los consumidores para que adquieran licores únicamente a través de canales de distribución autorizados y legales, y a denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con la venta de bebidas alcohólicas adulteradas.

La lucha contra el mercado ilegal de licores es una prioridad para ACIL, que busca garantizar la calidad y la seguridad de los productos que llegan a los consumidores colombianos.